Cuando un paciente posee una endodoncia fracasada o realizada de manera incorrecta, siguen existiendo bacterias en el interior del diente.
Estas pueden originar que la endodoncia fracase, dando al paciente una sintomatología: como la aparición de un dolor a la masticación, “sentir que sigue molestando”, o la aparición de una fístula o un abceso dental.
Normalmente, este fracaso se debe a que no se ha realizado correctamente desde el primer momento. Para realizarlo correctamente, se debe aislar el diente del medio oral, empleando un dique de goma. Posteriormente se instrumenta con unas limas rotatorias, se desinfecta y se rellena y sella con un material termoplástico para conseguir un hermetismo. Si cualquiera de estos procedimientos, no se hace de manera adecuada, esa endodoncia fracasará a los pocos años.
La reendodoncia suele ser un tratamiento de dificultad elevada, que requiere de un profesional cualificado y con experiencia suficiente para poder llevarla a cabo con éxito. Este procedimiento solo puede ser llevado a cabo por endodoncistas exclusivos.
Abordar una endodoncia que está fracasando es un tratamiento complejo, en el cual lo primordial es encontrar la causa de fracaso y, una vez analizado, podremos eliminar la causa y rehacer de nuevo la endodoncia.
Para ello, en Clinica Dental MiBO Almería, siempre realizamos una radiografía 3D (TAC Dental) para diagnosticar y analizar la forma o anatomía interna del diente y la causa.
Posteriormente, ayudándonos del uso del microscopio dental (para ver el interior del diente) analizamos qué parte de la endodoncia antigua está fallando.
Normalmente, estos fallos, suelen ser: conductos no encontrados, falta de desinfección, o falta de eliminación del tejido pulpar.
Una vez corregida la causa, se procederá a realizar de nuevo una endodoncia, retirando todo el material previo, desinfectando correctamente el interior del diente, y su nuevo relleno de manera adecuada.