Con la temporada de verano, y con ello los niños y adultos disfrutan de tiempo libre que mayoritariamente emplean en la playa o en la piscina o practicando deportes. ¿Y si sufrimos el habitual traumatismo dental? ¡En MiBo todo tiene solución!

Estas situaciones, pueden provocar que tanto niños como adultos reciban un traumatismo dental en los dientes y tejidos de la boca.

Normalmente, los traumatismos dentales se deben a contusiones provocadas por fuertes golpes por la práctica de deportes de contacto, caídas.

Su incidencia, es especialmente notable en niños con edades de entre los 6 y los 12 años, y más especialmente en verano. Aunque también puede afectar a los más pequeños durante sus primeros pasos, ya que poco a poco van adquiriendo una cierta autonomía.

Normalmente suelen afectar a los incisivos de la parte anterior de la cara, y más concretamente a los de la parte superior.

 

 

 

 

Qué hacer ante un fuerte golpe en los labios y dientes.

En primer lugar, no hay que caer en el pánico, y procurar mantener la calma. Sufrir un golpe en la cara, puede tener consecuencias muy variadas para los dientes, desde una fractura del esmalte dental hasta una pérdida de la pieza dental. En todos los casos, es necesaria la actuación y supervisión por un especialista en Endodoncia y Traumatismos Dentales, como es la doctora Cristina Vergel Alonso.

Ella evaluará la gravedad del golpe, y diagnosticará si hay daños imperceptibles en los dientes adyacentes al golpe.

¿Qué consecuencias tiene un traumatismo dental?

• Puede provocar roturas y cambio de la estética dental.
• Se puede modificar la posición inicial de la pieza dentro de la boca
• Se puede producir la inclusión de la pieza dental dentro de la encía del paciente
• Se pueden producir daños en el hueso que supera esos dientes, e incluso fractura y pérdida del mismo.
• Se puede perder la pieza por fractura horizontal o vertical debida al traumatismo.
• Se puede perder la pieza dental por excesiva movilidad del diente.

Lo primero, que hay que valorar es si hay afectación del nervio del diente y si existe movilidad.

Diagnóstico de los traumatismos dentales

Es de vital importancia, vigilar a los dientes afectados y a los dientes vecinos que han sufrido un traumatismo dental, porque el nervio o pulpa, puede verse afectado, creando una pulpitis (inflamación) o una necrosis pulpar.

Este diagnóstico se realiza sometiendo a los dientes de la zona a una prueba de frío  a muy baja temperatura  y la medición de la vitalidad con un pulpómetro. Si se encuentra afectado de manera irreversible el nervio del diente, es de vital importancia que se realice un tratamiento de conductos o endodoncia para limpiar ese nervio y que no aparezca un flemón. Así mismo, se debe de vigilar los dientes vecinos hasta pasados los 6 meses, para ver si no cambian su estado pulpar.

En muchas ocasiones, los dientes pueden poseer movilidad, que hay que evaluar y minimizar, siendo en muchos casos resuelta fertilizando el diente o los dientes afectados a las piezas adyacentes.

Tratamiento de los traumatismos dentales

En caso de una afección leve, es decir, de un astillamiento de los dientes, se deberá encontrar  y traer a la consulta si se puede el fragmento, porque se podrá volver a reposicionar y unir a la pieza dental, y en el caso que no sea posible, se restaurará el diente con una pieza de composite o en su defecto con una carilla dental.

En el caso de una afección más grave, y en el caso que se haya dañado la raíz, se debe recurrir a la extracción del diente y la sustitución por un implante dental.

¿Qué hacer en caso de traumatismo dental?

Lo primero, hay que distinguir de si se trata de un diente temporal (o de leche) o de uno definitivo.

En los casos de dientes temporales, se debe valorar si se reimplanta o no el diente afectado, pues éste puede afectar al germen del diente definitivo si no se hace de la manera correcta. En estos casos, se suele no reimplantar y colocar un mantenedor de espacio para evitar que el resto de dientes se muevan a esa posición.

En el caso de dientes definitivos, si existe avulsión o pérdida del diente definitivo se tiene que actuar de la siguiente manera:

• Ante la avulsión (o caída) de un diente, debemos recoger ese diente, sin limpiarlo ni apenas tocarlo o frotarlo, y acudir de manera inmediata al dentista. Este paso es muy importante, pues al frotar el diente, se eliminan las fibras del ligamento periodontal, que son las encargadas de que ese diente pueda volver a recolocarse y volver a “unirse” con el hueso.
• Para transportar ese diente se debe transportar en un recipiente con leche, o dentro de la boca del paciente afectado, en la zona de debajo de la lengua.
• Una buena actuación por parte del paciente y familiares, así como por el profesional a la hora de reimplantar el diente, es clave para conseguir reimplantar ese diente con éxito. En muchas ocasiones, el diente se fertiliza o une a los dientes vecinos para evitar su movilidad.
• Posteriormente hay que evaluar la vitalidad de ese nervio, y detectar posibles cambios en el color del diente.

Los traumatismos dentales, son una urgencia dentaria, y debemos darle la importancia que requieren.

En MiBO Clinica Dental Almería, contamos con la especialista en Endodoncia y Traumatismos dentales, la Dra. Cristina Vergel Alonso, que evaluará la gravedad del caso y el tratamiento más favorable para el mismo.

Puedes contactar con nosotros en el 950172434 o a través de nuestra web